Entre impunidad y calamidades (III)

AutorLaura Islas y Elthon García

TULTITLÁN.- Al dolor por la pérdida de Tiaria, la niña de 3 años asesinada por un empistolado cuando estaba en casa de sus abuelos, se suma la falta de resultados en las investigaciones... y hasta un robo.

A decir de Nancy Cornejo Gallardo, la mamá de la niña, los mismos agentes han reconocido que el caso se complicó a raíz del supuesto suicidio de la única sospechosa.

"Desde entonces no hay avances en nuestro caso", lamenta.

"Sólo sabemos que están más enfocados en resolver el problema de demanda interpuesta por la familia de ella (Marlene Vega Alpízar) porque tampoco creen que haya sido suicidio".

Tras más de siete meses de pasividad, apenas el martes 11 fueron recibidos por el Fiscal de Homicidios del Valle de México, Miguel Ángel Tostado Reyes.

El funcionario les reiteró que se mantenía la hipótesis de un crimen pasional.

Que tras catear su casa y revisar sus dispositivos móviles, Marlene seguía siendo la principal sospechosa de haber ordenado el homicidio, en venganza porque José Isabel Reséndiz, papá de la niña, rompió su relación con ella.

Sin embargo, admitió que todavía no hay elementos para dar con el autor material.

Por último, informó a los familiares que los cuatro agentes que fallaron en la custodia de la detenida enfrentan un proceso legal.

Los argumentos siguen sin dejar satisfecha a los Cornejo Gallardo.

"Entiendo y creo que es muy obvio que lo hayan relacionado, porque ella entró a la casa y porque él dice que era posesiva, celosa, etcétera.

"Es natural, y créeme que todos pensamos que sí iba por allí, pero no hay nada que lo demuestre y nos están deteniendo y yo no quiero que pase un año o dos años y me digan: pues no hay nada (contra Marlene)", reconoció Nancy.

Por si no fuera suficiente, la familia tuvo que lidiar también con el robo de pertenencias en la escena del crimen, ¡pese a que la casa tenía custodia policial!

Los 15 días posteriores al homicidio, policías municipales a bordo de la patrulla SSC-269 aparcaron frente a la vivienda.

Después dejaron el vehículo estacionado, pero sin ocupantes. Ya con las llantas bajas, hasta los vecinos lo utilizaron como depósito de basura, como se comprobó en imágenes que tienen los vecinos.

El 21 de mayo, un trabajador de la familia notó que había un vidrio...

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