Ahogado de la risa

AutorPez Globo

La prosa corta y la prosa larga, cuando quieras te la rimo

Un tipo que presumía de creativo, llega con su mujer.

- Mi vida, te escribí algo muy lindo

- ¿De verdad? -pregunta maravillada la mujer-.

- Si, mira, "Gordita, Gordeta, Gordis, sin usar los dientes hazme un guaguis; Gordis, Gordita, Gordeta, regálame un pedazo de tu teta para hacerme una chaqueta; Gordeta, Gordis, Gordita, préstame tu rabo, que con mi manguerita te lo retaca de lechita -recita el tipo cual poeta-.

La mujer se súper encabrona después de escuchar tan zoes rima y sólo dice:

- Amor, yo también te escribí algo.

- ¿En serio, mi vida? -pregunta el tipo-.

- Si, mira, "Calvis, Calvito, Calvetas, me desnudo si quieres, pero interés no tienes porque puto eres; Calvis, Calvito, Calvetas, no te puedo regalar pedazos de mis tetas para tus chaquetas, pero si te regalo los pelos de mi cuca para que te hagas una peluca, clavo hijo de puta.

Llegan dos tipos a un restaurante que tenía la particularidad que la única forma de que los meseros atendieran, era hablarles con rimas, aunque los dos tipos no sabían, entonces durante más de 10 minutos los cabrones fueron ignorados por los meseros, hasta que pusieron atención y en la meza de junto escucharon un diálogo entre mesero y comenzales.

- ¡Mesero, caballero! -dice una comensal-.

- ¡A sus órdenes distinguida dama, siéntase usted la ama! -responde el mesero-.

- Para mi marido de quien siempre tengo apoyo, tráigale una pechuga empanizada de pollo y para mí que por mi estatura soy pequeña, tráigame una...

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