Ahogado de la risa

AutorPez Globo

Cuando se entre en el ocaso de la vida, hay algunos ancianos que involuntariamente nos regalan tremendas carcajadas.

Una jovencita de 23 años consigue casarse con un multimillonario de 73 años.

La noche anterior, en la despedida de soltera, la chica confesó a sus amigas que su intención era hacerle tantas veces el amor, hasta que muriera de cansancio y, con suerte, quizás el pobre anciano falleciera la misma noche de bodas.

Tras una espectacular ceremonia, los recién casados se hospedan en un lujoso hotel.

El anciano entra en el baño, y la chica aprovecha para desnudarse y acostarse en la cama.

Cuando el anciano sale del baño, la chica comprueba horrorizada que él también está desnudo con un miembro erecto de aproximadamente 25 cm de largo y con el preservativo puesto.

Además, el anciano esposo llevaba dos tapones para los oídos y una pinza en la nariz.

- Pero, cariño, ¿qué vas hacer con eso?

A lo que él le responde:

- Hay dos cosas que no soporto en esta vida: El ruido que hace una mujer al gritar de placer y el olor a goma quemada.

Un anciano acude a la consulta con el médico y le dice: - Doctor, quisiera que me recetará alguna pastilla para poder hacer el amor todos los días. Pero no me recete Viagra, porque tengo problemas de...

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