Ahogado de la risa

AutorPez Globo

Un día cualquiera en el restaurante Villa Alma María...

Uno de los comensales solicita con estridencia:

-Mesero, mesero...

Luego de hacerse güey un rato, el mesero al fin se acerca para escuchar la petición.

-¿Tiene usted ancas de rana?-, dice el cliente.

-Sí, señor...

-Bueno, pues brinque hasta la cocina y ya tráigame mi filete, ¡hágame uste' el favor!

En la recepción del restaurante reciben una llamada:

-Hola, quiero reservar una mesa para cenar mañana.

-¿Para cuántas personas?

-Seremos 6 o 10, aproximadamente.

-Necesito saber cuántos confirmados.

-Confirmados dos, los demás solamente están bautizados...

Un comensal que recién acaba de saciar su apetito:

-¡Mesero, tráigame la cuenta!

-Por supuesto. Son 25 mil pesos.

-Achis, achis... ¿pues qué rompí?-, cuestiona el comensal.

-¡Pues la dieta, pinche gordo, ordenó todo nuestro menú!

Entra un señor en un restaurante, le entregan la carta y nota una leyenda en negritas que dice: "verduras a elegir".

Cuando se le acerca el mesero para pedirle la orden le pregunta:

-¿Y qué verduras tienen?

-¡Espárragos!

-¿Y qué más?-, inquiere el comensal.

-¡Nada mas!

-¡Oh, rayos! ¿Entonces, entre qué puedo elegir?

-¡Entre sí los quiere o no los quiere!

Un comensal que acude por primera vez al restaurante:

-¡Mesero, puede tomar mi orden!

El mesero se le acerca libreta en mano.

-¿Qué va a ordenar, señor?

-Una pizza hawaiana-, solicita...

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