Con chispa aérea

AutorJuan Santana

PUEBLA.- OBSTÁCULOS DUROS, como una fractura, es lo que ha tenido que superar Angel Spark, luchador poblano de corta trayectoria en los encordados, quien busca consolidarse en esta disciplina.

El gusanito de la lucha libre creció en él gracias a familiares luchadores, de quienes aprendió las primeras lecciones con duras sesiones de entrenamiento.

"Igual por la familia, tenía yo dos tíos que se dedicaban a esto, Celeste Boy y Cometa Boy. Ellos fueron los que me iniciaron, después tuve a mi profesor Gato Gris, que fue quien me siguió enseñando todo sobre este deporte", comentó.

Spark inició con buen paso, pero una fractura de tobillo retrasó su desarrollo, pues regresar a la actividad tras una lesión grave no fue fácil para él.

"En este deporte se necesita de preparación, muchos dicen que es farsa pero no, hay que estar en realidad bien preparados y concentrados, me lastimé el tobillo", recordó.

Ya recuperado, volvió a los cuadriláteros poblanos para hacerse de un nombre dentro de la escena local.

"Fue un poco difícil volver a empezar, a veces el tobillo se sentía un poco débil, pero gracias a Dios ya estamos bien", dijo.

Su meta es conquistar el campeonato estatal independiente de parejas, con su...

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