Conjugando el verbo matar

AutorSantiago Vega

"Matar es una feria, es una diversión. Ningún remordimiento ni nada, se ríen después de un asesinato, se van a comer una langosta a Rosarito, puro desmadre, así es la cosa."

El que habla es Alejandro Hodoyán Palacios, miembro del Cártel de Tijuana; su testimonio quedó videograbado el 30 de noviembre de 1996 y fue hecho en la V Región Militar por gente del General Jesús Gutiérrez Rebollo.

Las confesiones de Hodoyán, quien al poco tiempo se convertiría en testigo protegido de la DEA para luego arrepentirse y desaparecer, permitieron conocer a los Arellano Félix desde adentro.

Fue él quien contó que los hermanos primero se hicieron del poder económico para después obtener el de las armas. Y las usaban. Mucho.

Vean por ejemplo el caso de Armando El Rayo López. Sobre su muerte acaecida en 1989 existen diferentes versiones.

Según Hodoyán, luego de que Miguel Ángel Félix Gallardo repartió los territorios nadie lo respetó, todos intentaron meterse a las plazas de los otros, y fue así como El Chapo Guzmán mandó a su compadre El Rayo a Tijuana.

Periodistas como Jesús Blancornelas, avalan esa versión, pero en su libro "Narcotráfico el gran desafío de Calderón" de Editorial Planeta. El periodista Alejandro Gutiérrez le suma un matiz personal: "El Rayo" se había robado a Enedina años antes, según habría confesado en Estados Unidos Arturo Everardo Kitty Páez, el creador de Los Narcojuniors.

"Fue durante el bautizo de la hija de Benjamín Arellano, no recuerdo la fecha, pero estábamos en el Club Britania celebrando el bautizo y que llega El Rayo. El tenía a su gente en el Fiesta Americana, y que venía a pedir permiso para trabajar, apoyado por el Chapo Guzmán; llegó a la fiesta, al bautizo, y estaba tomado y coco y todo loco. Venía con una muchacha, una señora que se llama Silvia y salieron todos los jefes", narró Hodoyán durante el interrogatorio de las autoridades.

"El Rayo estaba en una pick-up con la Silvia al lado, que se decía prima de Miguel Félix. Y El Rayo decía que pinche escuincle por qué no me invita, refiriéndose a Ramón. Le estaba reclamando por qué no lo habían invitado, y los demás le decían: cálmate que Ramón se va enojar. Y por fin salió Ramón y al salir por la puerta nada más hizo así, pau, le tiró aquí, y allí lo dejó muerto.

Sería el asesinato del Rayo López una de las causas por las que El Chapo le declaró su enemistad a los Arellano, además de intentar apoderarse de la plaza de Tijuana, con Ismael El Mayo Zambada como aliado.

El...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR