Dejan hipnotizados a niños

AutorRebeca Herrejón y Paulina Martínez

GUADALAJARA.- CUENTAN EN voz alta del uno al 20 y de regreso. De fondo, una música relajante. Cuando terminen, algunos estarán dormidos, y otros tantos permanecerán de esta manera al finalizar la sesión de hipnosis.

O incluso irán así en el camino a su casa, donde varios de los estudiantes de la Secundaria Anexa a la Normal Superior de Especialidades, hasta se desmayaron.

"Nos estaba hipnotizando y a mí creo que me subió ahí (al estrado)", dijo Carla, una chica de primero de secundaria que salió del plantel con las manos frías y la mirada perdida.

Raúl Baeza Maldonado, Barraman, el hipnotista, no se explicaba qué pasó. Desde el año pasado acude al plantel para hacer un show colectivo de hipnosis y ayudar a los jóvenes en sus estudios.

"Yo desconozco todo esto, también, no sé, desconozco", dijo, mientras subía a una patrulla de la Policía de Guadalajara.

Dentro de la escuela, una decena de estudiantes, como Carla, tenían baja la presión y los ojos perdidos. Un par de ellas fueron escoltadas por paramédicos tapatíos hasta la ambulancia. Lupita, de 14 años, incluso convulsionó, pues tenía una afección previa.

Hubo cuando menos dos funciones, de dos horas de duración, en las que aproximadamente cinco jóvenes llegaban al trance de la hipnosis, relataron otros jóvenes.

Cuando salieron, les llegó 'el bajón'. A algunas niñas se desvanecieron en el baño.

"Yo no pude, porque sentía que...

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