Una niña bien... mala / Sol, Mar, Pasión y Seducción

AutorMilah

¡Ahora recuerdo por qué extrañaba tanto venir a la Riviera Maya!

Luego de una semana de dar mis talleres de Masaje Tántrico, tengo que confesarles que ha sido mi mejor semana en mucho tiempo.

He conocido parejas de todo el mundo y con toda clase de intereses y fantasías, el cachondeo en el antro y en el "play room" cada noche es alucinante, cada día hay una temática diferente que las mujeres aprovechamos para ponernos de lo más sexy y utilizamos todos nuestros encantos para seducirnos.

Dentro de todo este ambiente afrodisíaco y lleno de erotismo, casi desde el inicio de mi viaje me topé con alguien muy especial que me ha traído con la libido a tope desde que llegué y, aunque al principio ambos tratamos de contener nuestras emociones, definitivamente la química entre los dos pudo más y luego de pasar horas bailando y sintiendo nuestros cuerpos con tanta proximidad al ritmo de un cachondeo que nos calentaba sin parar, de pronto estábamos ya enfrascados en un beso mágico que nos hechizó para desearnos con vehemencia.

Hacía mucho tiempo que no disfrutaba un beso tan delicioso, lleno de ternura y acompañado de un alto nivel de feromonas, así que salimos de aquella tumultuosa fiesta donde nos habíamos encontrado, tratando de evadir a todos los demás hasta mi habitación.

Sus besos me excitaban y yo moría por tenerlo al fin completito para mí, pero él insistió en bajar el ritmo y se dispuso a disfrutar en cámara lenta, detalladamente cada centímetro de mi piel.

Mientras sentía sus manos abrazándome, me quité el vestido para quedar totalmente vulnerable ante él, me tomó de la cintura y siguió con su recorrido a través de todo mi cuerpo deseoso por él.

La pasión desbordada nos aventó contra cada rincón de cuarto y entre tirones y besos, alcanzamos un nivel de calentura que apenas puedo creer.

Poco a poco fuimos calmando nuestros ímpetus, hasta controlarnos y llegar a la cama, donde al fin logré tenerlo bajo mi dominio sentándome sobre él.

Lo probé a plenitud mientras...

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