Oyeron gritos

AutorFrancisco Rivas

ATZALA.- "¡Ayúdennos, no queremos morirnos!", gritaron quienes quedaron atrapados en el interior de la iglesia de Santiago Apóstol, en Atzala.

Romel Campos, de 9 años de edad, y otros menores oyeron los lamentos mientras jugaban en el Zócalo de la de la comunidad, después de caer el techo del inmueble religioso.

Tras disiparse el polvo, narraron, comenzaron a escuchar los gritos de personas que clamaban auxilio.

Cirila Irene Sierra, abuela de Romel, contó que su nieto tiene daños psicológicos por atestiguar la caída del techo del templo y a los sobrevivientes.

"Pobre de mi nieto, me dice que ya no quiere ver esto, que ya quiere olvidarse de lo que vio porque le da mucho miedo", mencionó, mientras observaba los restos del inmueble católico.

"Romel tiene 9 años y estaba jugando aquí en el parque junto con otros niños de la misma edad cuando comenzó a temblar y me contó que se agarraron de las bancas cuando escucharon el tronido del techo de la iglesia y apenas después los gritos que les pedían ayuda"...

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