Zona submetropolitana / Apatzingán: fue el estado
| Autor | Héctor Castillo Berthier |
Las cosas se están poniendo feas para el periodismo independiente.
El gobierno federal fue atrapado otra vez en una masacre, en Apatzingán, que no quiere reconocer.
En esta ocasión, un reportaje publicado en Proceso por la periodista Laura Castellanos, nos habla de una matanza del 6 de enero de 2015, cuando el hoy director general de la CONADE (Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte), Alfredo Castillo, era comisionado federal de Seguridad en Michoacán y quien reportó entonces, que los muertos que hubo fueron producto de un "fuego cruzado".
Proceso, Aristegui Noticias y el canal norteamericano Univisión, publicaron una investigación y videos de los hechos.
El gobierno federal se ha cerrado. No quiere más malas noticias. Se instaló en una "imposición de hechos", donde sólo ellos tienen la razón.
Por eso vale la pena hacer un breve acercamiento histórico a la ciudad de Apatzingán.
Hace poco más de doscientos años, el diputado por el reinado de Nuevo León -y sacerdote- José María Morelos y Pavón, llegó a la ciudad de Apatzingán, Michoacán.
Había llegado debilitado militarmente, huyendo desde Acapulco, Tlalchapa y Uruapan, perseguido por las tropas del Virrey de la Nueva España, Félix María Calleja.
Morelos se encontraba cerca de su natal Valladolid (hoy Morelia), en el estado de Michoacán. En medio de la persecución, se encontraba Morelos junto con Andrés Quintana Roo y otros nueve diputados insurgentes de las 17 provincias (que funcionaban mejor que los 500 que hay ahora).
Este grupo celebraba ahí en Apatzingán el Congreso de Chilpancingo, en el cuál se escribió el Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana, mejor conocida como la "Constitución de Apatzingán".
Esta Constitución es el primer texto constitucional escrito en México.
En las primeras hojas se leen las intenciones de los entonces diputados, y por las que se decretarían leyes: "Que obliguen a la constancia y patriotismo; moderen la opulencia y la indigencia; y de tal suerte se aumente el jornal del pobre, que mejore sus costumbres, alejando la ignorancia, la rapiña y el hurto".
Eso querían hace 200 años... y lo seguimos buscando.
Ahí plasmaron los derechos humanos básicos: libertad, igualdad, seguridad y propiedad.
Y, por si fuera poco, además garantizaban la libertad de imprenta.
DÍA DE REYES
Apatzingán está en la zona que se conoce como Tierra Caliente.
Recuerdo en algún viaje por carretera, después de pasar Morelia, después de cruzar por lugares como...
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